Columna Territorio Yaqui
Existen señalamientos periodísticos sobre los homicidios registrados recientemente en Ciudad Obregón, algunos fundados y otros meras especulaciones, sobre los ataques a tres miembros del gremio periodístico, quienes fueron privados de la vida, uno a balazos y otro a cuchilladas, además de una dama en circunstancias ya establecidas legalmente por la Fiscalía General de Justicia del Estado, como una muerte por intoxicación de monóxido de carbono.
Los tres casos en circunstancias diferentes, el primero en agravio del propietario de Medios Obson, Jorge Armenta, quien recibió varios impactos de bala a manos de desconocidos que lo sorprendieron junto a dos elementos de la Policía Municipal de Cajeme, uno muerto y otro herido, al salir de un restaurante del sector Centro en Ciudad Obregón.
Por supuesto, éste asesinato propició que algunos medios de comunicación de la localidad exigieran justicia para resolverlo, incluso, por ser éste relacionado con el gremio periodístico del Municipio, la gobernadora Claudia Pavlovich ordenó a la Fiscal Estatal, Claudia Indira Contreras, acudiera personalmente a Cajeme, a encabezar las indagatorias.
A poco más de un mes del crimen, obviamente los empleados de Medios Obson, exigen justicia para que se resuelva y lo hacen directamente a la FGJE, quién tiene las indagatorias. Pero como todo tiene su trabajo, al no tener a los culpables, la exigencia crece.
Parte de esas investigaciones, al menos a lo que se tiene hasta ahora, se dice que es complejo, y hasta donde se tiene, existen indicios de que no necesariamente podría haber sido perpetrado por asuntos relacionados con el periodismo, por lo que se mantienen varias líneas de investigación.
Después ocurre el que ahora sabemos no es un homicidio contra un miembro del gremio periodístico, como lo es el de Alma Angélica Aguilar, quien junto a un hombre fueron encontrados en la habitación de un Motel ubicado a la salida Sur de Ciudad Obregón, y que al conocerse del caso, los reporteros, al menos lo que cubren la fuente policiaca, señalaron como un homicidio por simple deducción, pero sin tener las pruebas para ello.
El caso, también fue priorizado por el gremio periodístico, señalando un ataque a otro periodista, cosa que como ya todos sabemos no ocurrió. Y lo peor, a pesar de que la Fiscalía Estatal ya realizó las pruebas periciales científicas y determinó las causas de la muerte, la prensa local lo sigue manejando en sus espacios como un doble homicidio.
También se registra la muerte en contra José Castillo, quién de acuerdo a las investigaciones, salió de su domicilio aproximadamente a las 7 de la mañana, ya herido a buscar ayuda, pero murió víctima de heridas producidas con arma blanca, quedando tendido en la banqueta frente a su casa.
Éste hombre, manejaba en forma esporádica un portal de noticias en internet, pero su oficio era el de guardia de seguridad, sin embargo, fue de inmediato señalado como periodista por los propios reporteros. De ésta forma tomo fuerza en los medios de comunicación, sin embargo, las primeras indagatorias establecieron que fue atacado en el baño de su domicilio, y las pesquisas ya se encuentran adelantadas, mismas que también so tienen nada que ver con la función como periodista.
Parafraseando al gran cómico Cantinflas, “No es lo mismo ser del cuarto poder, que poder salir del cuarto”, valdría la pena establecer criterios legales para que los medios de comunicación expresen sus exigencias en cuanto a intentar forzosamente y públicamente, señalar que se trata de un atentado contra la libertad de expresión, pues una cosa es la vida personal de un periodista y otra su quehacer de oficio, y no por el hecho de dedicarse al periodismo su muerte tiene que estar relacionada forzosamente con el periodismo.
Muestra de que los periodistas no respetan la Ley, pero que amparados en su “charola” de periodistas la violan, es el de un reportero local de un medio en internet, que al ir circulando en su vehículo, narrando en vivo por celular, manejando, no respetó el semáforo en rojo violando un señalamiento de tránsito, sólo por el hecho de ser del “Cuarto Poder”; cosa que le originó varios señalamiento de quienes vieron la noticia. Salud.
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