Alrededor de un grupo de 16 personas se reúnen frente al cerro conocido como “La Cementera” en Hermosillo, Sonora. A las 15:30 horas es momento de comenzar una expedición en la cueva “Santa Martha” ubicada a unos 500 metros de las faldas de este.
Omar Calva, cofundador del Grupo Pionero Espeleológico de Sonora, es uno de los cuatro guías para llevar a cabo el recorrido.
El espeleólogo explicó que este lugar, en la capital del estado, es el hogar de murciélagos (macrotus californicus) y otras especies de amblipígidos (conocidas como arañas látigo). Esta especie de murciélago se adapta muy bien a ciudades y su población dentro de la cueva varía de 150 a 200 ejemplares.
Mencionó que adentro, la temperatura oscila entre 23 a 26 grados, con una humedad de 50%, misma que se mantiene en ese rango la mayor parte del año debido a la estructura de la cueva y a su único acceso.
Calva y el resto de los guías, advierten al grupo de cómo una vez iniciado el recorrido dentro de la cueva, las condiciones visuales, de espacio y temperatura cambian abruptamente, por lo que las especificaciones deben seguirse al pie de la letra para evitar accidentes y disfrutar al máximo la aventura.
Créditos de las fotos: Sergio Müller y Omar Calva.
“La cueva tiene tres salas principales: la primera denominada Primera Sala, es la más amplia del recorrido, pasamos a la segunda llamada “La sala de la Santa Muerte” por el peculiar graffiti que se encuentra en ella y una tercera sala, llamada de “La Virgen” igualmente nombrada por la imagen plasmada ahí”, dijo el biólogo.
La sala principal, tiene un aproximado de ocho metros de altura en su parte más alta; los espacios son estrechos, poco aptos para personas que padezcan claustrofobia o temor a la obscuridad, ya que como parte del recorrido en momentos se solicita al grupo apagar en su totalidad las luces para percibir mayormente la experiencia.
A medida que el recorrido avanza, y que consta de tres horas, la adrenalina te acompaña para avanzar por los angostos espacios hacia la siguiente sala.
En ocasiones es necesario “gatear” o arrastrarse por el piso y recargarse en las paredes para poder continuar.
“El brazo siempre debe estar hacia arriba de la cabeza, ya que al estar encorvado te puedes atorar, ademas de mantener en movimiento los pies,” eran las instrucciones del guía, quien tiene más de siente años de experiencia explorando cuevas.
Si alguna persona está interesada en las expediciones pueden contactarse con el biólogo Omar Calva en la página de Facebook Grupo Pionero Espeleológico de Sonora o al celular 6624 23 55 94.