Reuters.- El peso perdió este viernes por séptimo día consecutivo, registrando su racha bajista más profunda desde que fue electo el presidente estadounidense, Donald Trump a finales de 2016, arrastrado por una venta global de activos de riesgo debido a temores sobre el coronavirus.
El gobierno mexicano confirmó el viernes los dos primeros casos de la nueva cepa del virus en el país.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV), por su parte, cerró su peor semana desde la crisis financiera de 2008, afectada también por un aumento en las tensiones geopolíticas, particularmente un conflicto recién surgido entre Rusia y Turquía.
La moneda cerró en 19.61 por dólar, con una pérdida del 0.52% frente a las 19.5080 unidades del precio de referencia de Reuters del jueves.
La baja acumulada por el peso en las últimas siete jornadas fue de alrededor de un 5.7%, liderando las pérdidas en una muestra de 25 monedas de países emergentes monitoreda por Reuters.
La racha negativa de la moneda fue superada solo por el rally bajista registrado en los días posteriores a la elección de Trump, cuando perdió más de 13% en solo tres días.
Apenas la semana pasada, el peso había tocado niveles cercanos a 18.50, su mejor nivel en los últimos 18 meses.
Analistas dijeron que operadores habían utilizado al peso como una especie de “cobertura”, por lo que una vez que comenzó una venta masiva global, vendieron a la moneda mexicana, provocando una acelerada depreciación.
Mientras tanto, el referencial índice S&P/BMV IPC, integrado por las acciones de las 35 firmas más líquidas del mercado, cayó un 0.68% a 41,324.31 puntos.
Más temprano, el principal índice bursátil local alcanzó un declive de hasta un 4.25%. Sin embargo, el indicador recortó las pérdidas ante la generación de compras de oportunidad.
“Muchos analistas tenían un piso para la bolsa en 42,250 y al perforar ese nivel hubo recomendaciones de compra. Los niveles que alcanzaron muchas acciones eran de sobreventa”, dijo Gerardo Copca, especialista de mercado de capitales de Metanálisis.
En la semana, la caída acumulada fue de un 7.76%, la más grande en 12 años, según datos de Refinitiv Eikon.
En el mercado de deuda, el rendimiento del bono a 10 años ascendía 15 puntos base a 6.85%, mientras que la tasa a 20 años subía 17, a 7.15%.