Nápoles.- Cuando Lionel Messi suba la escalera desde la fosa que rodea el terreno de juego del estadio San Paolo, pisará un césped sagrado: El de la cancha donde su compatriota Diego Maradona produjo algunos de sus momentos más memorables y donde es venerado como un dios.
Dos campeonatos de la Liga de Italia ganó el Nápoles con Diego Maradona
Alcide Carmine, propietario de un bar en el centro de Nápoles tiene un altar dedicado a Diego Armando Maradona.
Para nosotros, Maradona es más que un hombre. Es un dios. A los napolitanos nos encanta el futbol, vivimos para el futbol”, manifestó Carmine en una entrevista mientras tomaba un espresso. “Jamás olvidaremos lo que hizo por nosotros”.
En el altar del Bar Nilo hay lo que se asegura es un cabello de Maradona adentro de una caja transparente rotatoria. Lo describen como el “cabello milagroso”.
Carmine dice que recogió el cabello en 1990, cuando tomó el mismo avión que Maradona al regresar a Nápoles tras asistir a un partido de visitante.
Cuando se levantó, quedaron algunos cabellos en su asiento”, afirmó Carmine. “Me los llevé y se me ocurrió hacer esto”.
Tras irse de Barcelona, donde juega ahora Messi, Maradona recayó en Napoli y le dio los dos únicos campeonatos italianos que ganó en su historia, los de 1987 y 1990, además de la Copa UEFA de 1989. En esa época el astro se coronó campeón mundial con Argentina en México 86, tras eliminar a Inglaterra en los cuartos de final con el famoso gol de Maradona con la “mano de Dios” y otro que es considerado tal vez el mejor tanto en la historia de los mundiales, tras dejar en el camino a medio equipo inglés.
Napoli, una ciudad pobre sin muchos servicios sociales básicos, nunca había ganado nada importante hasta la llegada de Maradona.
Vimos con nuestros propios ojos los milagros que hizo”, declaró Carmine. “Los otros milagros son solo cuentos”.
A Carmine se le ocurrió instalar un altar a Maradona en el bar tras ver la cantidad de altares que había en los oscuros callejones de Nápoles, con velas que ayudaban a la gente a ubicarse durante los apagones.
Pero no es el único napolitano que busca formas de expresar su devoción por Maradona mediante rituales religiosos. A poca distancia de su bar se encuentra la Via San Gregorio Armeno, una estrecha calle llena de negocios que venden pesebres hechos a mano. Junto al niño Jesús, a María y a José hay reproducciones de Maradona y del actual astro del club, Dries Mertens.
Información de excelsior.com.mx