Hermosillo, Sonora.- La soprano Dolores Martínez demostró en el escenario su potente voz y transporto a los asistentes hasta las noches de música que se vivían en el “Salón México”.
Al filo de las 20:30 horas de ayer músicos integrantes de la Orquesta Filarmónica de Sonora subieron al escenario e interpreto “danzón y arrabal” con la cual abrió la presentación de la soprano Dolores Martínez, quien momentos después hizo su aparición al escenario de la Plaza Alonso Vidal.
Con singular alegría que la caracteriza no dudo en interactuar con el público y pidió que la ayudaran con el coro de las canciones que fueron éxito en los años 30, 40 y 50, en voces de cantantes de la música mexicana en la época de oro y fueron escritas por Pérez Prado, Agustín Lara, Joaquín Pardavé y Luis Alcaraz.
Pero “Salón México” no solo era danzón o bolero, sino también, ritmo y sabor por lo que Dolores Martínez no dudo en bajar del escenario, ir hasta donde se encontraba sentado el público y se puso a bailar a los hermosillenses uno de las canciones emblemáticas de Pérez Prado, “Mambo”.
Ovacionada y acompañada de un largo aplauso no la dejaron bajar del escenario al grito de “otra, otra, otra” la soprano no tuvo más que regresar al escenario e interpretar “Noche redonda” demostrando una vez más porque fue en 1991 por el fallecido tenor Luciano Pavarotti a su natal Módena, Italia para interpretar temas mexicanos en un concierto.
Información de Erika Velásquez